{image}http://www.eldia.co/images/stories/020910/004.jpg{/image}Cuando se intenta analizar objetivamente la política de seguridad democrática desarrollada por el anterior gobierno, con un compromiso programático del actual de continuarla y profundizarla, existe la necesidad de verificar los resultados reportados por las agencias oficiales.
El primer problema que se presenta es la carencia de una fuente de datos primarios debidamente sistematizados y unificados. Su inconsistencia, así como la falta de continuidad periódica y temática, la diferencia de cifras y metodologías entre varias entidades intentan persuadir al investigador para que desista de su molesta curiosidad.
La estrategia de la seguridad democrática fue un tema que la mayoría, si no todos, los candidatos a la presidencia de la República en campaña, reivindicaban como una política eficaz en la disminución de la violencia y el crimen mediante el ostensible aumento de la seguridad ciudadana en Colombia. Además los medios, los empresarios y algunos sectores de la opinión pública, manifiestan incansablemente este logro del Presidente Uribe como la re-liberación de la patria llevada a estándares de seguridad, convivencia y paz. Tanto es así, que sustentan que a dicha política se le debe el éxito del exclusivo y excepcional crecimiento de la economía colombiana, mientras que Europa, Estados Unidos y Latinoamérica se debaten en una profunda crisis.