Espionaje, drones y robots, nuevas amenazas para los Derechos Humanos
"Una continua vigilancia es necesaria para asegurar que las nuevas tecnologías impulsen en lugar de destruyan los derechos humanos", señaló la alta comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay.
En un mensaje por el Día de los Derechos Humanos, la funcionaria llamó la atención sobre la vigilancia electrónica masiva y la recolección de informaciones personales, como prácticas violatorias de las leyes internacionales.
Aunque sin mencionar a países y hechos específicos, afirmó que se trata de "amenazas para los derechos individuales y el libre funcionamiento de la sociedad civil".
Las revelaciones del exintegrante de la comunidad de inteligencia estadounidense Edward Snowden sobre el espionaje de Washington contra más de 30 países -incluyendo algunos de sus aliados- colocó este año el asunto en la palestra.
También los vehículos aéreos no tripulados (drones) despiertan críticas y preocupaciones por su empleo para atacar a personas en la llamada guerra contra el terrorismo librada por la Casa Blanca en los últimos años.
"Los drones pueden usarse para propósitos positivos, pero también son dotados de armas para el ataque remoto a individuos, sin que medien procesos legales", advirtió la alta comisionada de los Derechos Humanos.
En sintonía con las inquietudes de Pillay, expertos independientes de Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales han emprendido pesquisas sobre las operaciones de esos artefactos del Pentágono en Afganistán, Pakistán y Yemen, donde se reportan decenas de civiles asesinados por drones.
Pillay alertó además en su mensaje por el Día de los Derechos Humanos del desarrollo de sistemas autónomos de armas conocidos como Robots asesinos, por su capacidad de golpear blancos sin necesidad de la intervención humana.
Esos equipos ya no pertenecen a la ciencia ficción, son una realidad, lamentó.
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