{image}http://lh4.googleusercontent.com/-cbS_xivX9hw/UmlCIl1UVKI/AAAAAAAADzA/ECYsJdJnbxc/s500/001.jpg{/image}Panamá, 24 oct (PL) El paro médico iniciado el 26 de septiembre en protesta por una ley de contratación de especialistas extranjeros se mantiene , aunque las negociaciones continúan hoy con la tercera reunión entre el arzobispo de Panamá y dirigentes gremiales.

En la mesa de discusión continúa la revisión de la Ley 69 artículo por artículo, sancionada por el presidente, Ricardo Martinelli, ante las cámaras de televisión, cuando médicos, enfermeras y técnicos estaban en la calle protestando, lo que fue calificado por los gremios de una burla y un reto.

Esa acción radicalizó a los gremios y aún no tienen una claridad si abandonar su demanda principal de que se derogue la ley, o aceptar una reforma planteada por el gobierno y ya enviada a la Asamblea Nacional aún cuando no hay acuerdo al respecto.

Julissa Rodríguez, dirigente de la Comisión Médica Nacional Negociadora (Comenenal), reiteró que no habría fin del paro si no media un documento firmado por todos en el que se garantice que se cumplirá con el acuerdo final que se adopte.

La gremialista fue clara al afirmar que hay desconfianza en el gobierno y de igual manera opinó Elidya Espinosa, líder del gremio de las enfermeras.

Los huelguistas no han visto con buenos ojos que el Ministerio de Salud presente a la Asamblea un proyecto que modificaría la norma sin llegar primero a un consenso y dudan de la afirmación del ministro Javier Díaz de que con eso espera que la huelga se acabe.

Leopoldo Santamaría, médico de Comenenal, insistió que por lo visto no acaban de entender que el trasfondo de la nefasta ley 69 es la privatización del sector para que inversionistas extranjeros con nacionales coludidos puedan lucrar con los servicios públicos de salud.

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