Rebeldes sirios podrían impedir control de armas químicas
Según el sitio de periodismo investigativo Consotium news, las bandas armadas están molestas y decepcionadas con la decisión del presidente Barack Obama de estudiar un plan de Rusia de identificar y destruir los armamentos, así como la posterior firma por parte de Damasco de la Convención Internacional para prohibirlos.
Obama el martes pasado también ordenó al Pentágono mantenerse en posición para atacar a Siria, aunque pidió al Congreso retrasar la votación sobre el proyecto de ley que lo autorizaría a invadir ese país de Medio Oriente para dar tiempo a analizar el plan de Moscú.
La publicación alerta que los insurgentes podrían no respetar un eventual alto el fuego y, en consecuencia, poner en peligro las vidas de los inspectores internacionales o sabotear su trabajo en la nación árabe.
También indica que los opositores al gobierno del presidente Bashar al-Assad tampoco han dado señales de querer participar en un diálogo de paz porque lo que en realidad buscan es la intervención militar de Estados Unidos y sus aliados en la crisis interna.
Mientras, un documento clasificado del Ejército norteamericano constató que los mercenarios tenían acceso a las armas químicas antes del supuesto ataque del pasado 21 de agosto, del cual Washington responsabiliza a las autoridades de Damasco.
El sitio canadiense Global Research reveló ese texto, que indica que en mayo pasado fuerzas turcas confiscaron un cilindro con dos kilogramos de gas sarín durante la inspección a las viviendas de varios rebeldes. En la redada también ocuparon varias armas, textos y datos digitales, además de detener a 12 integrantes de frente al-Nusra.
Según Global Research, altos oficiales de inteligencia de Estados Unidos afirman que las bandas sirias son responsables de lanzar sustancias tóxicas contra la población civil y no el Gobierno.
La Casa Blanca usó ese incidente como argumento para amenazar con atacar Siria, aunque al menos 60 por ciento de los ciudadanos y militares norteamericanos rechazan esa idea tras las costosas e infructuosas guerras en Irak y Afganistán.
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