{image}http://eldia.co/images/stories/020512/02.jpg{/image}El cobro de los llamados servicios financieros cuestiona la función empresarial de las entidades bancarias.

Las empresas procesan las materias primas e insumos para entregar a la sociedad un producto útil, para satisfacer una necesidad.

¿Cuál es la materia prima e insumo de los bancos y cuál es el producto que entrega a la sociedad?

Una bodega tiene de insumo un lugar o espacio físico y de mano de obra una vigilancia donde uno deja un objeto y el producto es la seguridad de que el objeto permanece allí intacto hasta que su propietario lo reclama. ¿El banco me recibe mi dinero (billetes y monedas en físico), lo deja quieto y me devuelve el mismo dinero físico que le entregué?

Cuando los bancos reciben el dinero, este le da liquidez a la oficina receptora, le permite hacer pagos de cheques, pagar avances, dar créditos, hacer negocios de oportunidad entre otros. Es decir el dinero de los ahorradores y el de los accionistas son el capital de trabajo del banco.

Digamos que descomponemos la actividad entre el servicio de bodegaje y el de reconocimiento de la rentabilidad del capital (ahorros). La cuota de administración es el cobro por el servicio de almacenamiento – virtual- del dinero. Los banqueros ponen el capital en el mercado con una tasa de interés del 21% anual a través de los préstamos, el capital de los accionistas queda reconocido al 21% y el de los ahorradores el 5% anual, es decir le cobran le cobran al ahorrador el 16% por mover el dinero en el mercado de capitales para reconocer solo un 5%. Además, le cobran por retirar el dinero de su propiedad en el momento que quiera disponer de él. Es algo así, como si yo llevara mi taxi a un garaje, que es una ventanilla de recepción, lo entregara, el dueño del garaje me cobrara el almacenamiento del vehículo e inmediatamente lo entregara a uno de sus empleados para que lo trabaje toda la noche, el vehículo produjera 21000 pesos y en la mañana yo voy, me entregan de producido 5000 pesos y si lo retiro me cobran una parte de este producido o un valor superior.  

Con las tarjetas de crédito debo pagar el respaldo y para que el banco lleve mis cuentas con la llamada cuota de administración y debo pagarles para que me entregue el dinero por el cual voy a pagar una tasa de interés cuando hago el retiro por caja o cajero automático. Además, ellos ganan por punta y punta porque le cobran a las entidades que las acepta como medio de pago una tasa sobre la compra.

Las ganancias de 1,3 billones de los bancos se da por esta inequidad que se da en el sector dada la posición dominante que posee frente a los usuarios, se aúna que a pesar de existir varios bancos no existe una competencia entre ellos y en realidad se comportan como un sindicato empresarial que impone tarifas monopólicas, por algo están sindicalizados en la Asociación Bancaria.

En la asamblea de la Asociación Bancaria, su presidente María Mercedes Cuellar le planteaba al gobierno que los dejara autorregularse, pero la verdad, ellos no han dado indicio de prudencia social ni de interesarse en establecer cobros justos y con equidad, los domina su ambición por el capital y el poder que de él se deriva.

Los ciudadanos colombianos no tenemos un gobierno que nos defienda del poder del sistema financiero. La Superintendencia Financiera actúa como una observadora complaciente pues la política no es regular el sector, por lo contrario es dejar suelto el gato en medio de los ratones para que este se los coma, con la gravedad que es un gato hambriento y abusivo.

Las empresas normalmente dan bienestar a compradores y usuarios, en el caso colombiano se observa que los bancos ocasionan una situación en la cual los ciudadanos se descapitalizan, ven disminuido su bienestar y caen en una especie de esclavitud, en tanto las entidades bancarias obtienen desproporcionadas ganancias, son los esclavistas de la modernidad.

Adicional a lo anterior, los trabajadores nos vemos obligados por las empresas a abrir cuentas de ahorros para que nos depositen nuestros salarios y los costos de la cuenta son a cargo del trabajador. Lo anterior le disminuyó a los empresarios costos por pagadores, cheques y de papelería entre otros, en tanto a los trabajadores nos disminuye el salario real y nos entrega al sistema financiero. Estos costos deberían asumirlo las empresas porque obedece más a sus necesidades de sistematización o innovación tecnológica que a un beneficio para el trabajador. Es hora que el gobierno regule y nos proteja de empresarios y banqueros.

César A. Cárdenas A.
Secretario General de Fenasibancol