Ante la retaliación de la Secretaría de Educación Distrital y el Ministerio de Educación Nacional frente a las labores de recuperación de clase, la ADE llama al magisterio a estar alerta. Un nuevo conflicto laboral podría despertarse por la dictadura que quiere ejercer la ministra.


“Nos toca de nuevo a los maestros organizarnos para reiniciar el Paro. Precisamente porque el Ministerio de Educación nacional los acuerdos se los está pasando por la faja. No tiene en cuenta los planteamientos que se han hecho sobre la recuperación a ninguna de las regiones que lo van venido proyectando”, expuso William Agudelo, presidente de la ADE.

Por ejemplo, el MEN ha rechazado todos los acuerdos entre los sindicatos y la institucionalidad de Cundinamarca, Norte de Santander o Huila, pues no acepta días de recuperación ni en octubre, ni en noviembre, ni festivos, ni en sábados, ni en jornada contraria.

Básicamente, pretende imponer de manera unánime, y desconociendo la autonomía de las instituciones y secretarías, que los estudiantes terminen dando clases los días 24 y 31 de diciembre y hasta las primeras semanas de enero.

Por supuesto, el objetivo sería, por un lado, generar rechazo entre los padres de familia y estudiantes hacia los docentes. Y, por el otro, una cierta “vendetta” contra los maestros por haberse comprometido tanto el Paro.

Cabe recordar que una de las razones por las cuales la protesta se extendió fue porque la ministra mostró una actitud provocadora y represiva. Además, el magisterio capitalino fue uno de los más comprometidos con el Paro en todas las convocatorias.

“Están incumpliendo, el viceministro (de Educación) Pablo Jaramillo.  Está en contravía de los acuerdos y está buscando la manera que los maestros  no desarrollen las actividades de recuperación. Es una situación bastante grave”, precisó Agudelo.

En Bogotá, la Asociación Distrital de Educados ha buscado la forma de modificar el calendario de manera que ni estudiantes ni docentes resulten afectados. Pero la SED, siguiendo dictámenes del Ministerio, está renuente a este acuerdo y busca imponer unilateralmente su propio calendario.

Por esta falta de voluntad, los encuentros entre las partes no han sido productivos. La preocupación entre los padres y madres de familia es alta. Por eso, el llamado de la ADE a la comunidad educativa es a estar atentos y prestos a responder el llamado de su organización sindical.