{image}http://eldia.co/images/stories/181011/001.jpg{/image}Continúa la lucha estudiantil contra el Proyecto del Gobierno Santos de privatizar y hacer de las universidades instituciones con ánimo de lucro.

La reforma Santista, radicada por la Ministra de educación, permite la creación de  universidades de economía mixta y convierte el Fondo de Desarrollo en una sociedad anónima.

El TLC autoriza inversión extranjera y ganancias en educación superior. Empeora la crisis financiera de universidades públicas. Se lesiona la autonomía universitaria y se fortalece le negocio financiero. El Presidente Juan M. Santos falta a la verdad al decir que no se busca privatizar la universidad pública: en su reforma a la educación superior no ha eliminado el ánimo de lucro ni la privatización.

El senador del PDA, Jorge E. Robledo denunció que la propuesta del gobierno crea las instituciones de economía mixta en la educación superior, es decir, empresas que se rigen por el derecho privado con el propósito de hacer ganancias. Incluso puede ser peor, porque universidades públicas pueden terminar convertidas en mixtas.

La reforma también transforma el Fondo de Desarrollo de la Educación Superior, entidad encargada de estructurar los proyectos para la expansión y mejoramiento de la calidad de la educación, en una sociedad anónima de economía mixta. El presidente Santos también oculta que el capítulo de inversiones del TLC con Estados Unidos autoriza las universidades con ánimo de lucro y que el del comercio transfronterizo de servicios autoriza a los norteamericanos a prestar, desde Estados Unidos, servicios educativos virtuales, inversiones que se harán buscando el lucro.

La reforma empeora la crisis financiera de las universidades públicas, porque las cargas que les impone son muy superiores a los recursos que se les trasladan. Hay rechazo a que los créditos financieros sean el principal instrumento para que los jóvenes accedan a la educación superior. Los recién graduados tendrán múltiples dificultades tanto de ingresar al mundo laboral, con empleos decentes y bien remunerados, para iniciar el largo período de abonos hasta cancelar los créditos: cinco años estudiando…15 años pagando!