Tres integrantes de la comisión negociadora de la Uneb con el Banco de Bogotá dieron un parte de cómo arranca este proceso y las expectativas a futuro. Solo se debe anotar un dato, el banco es de lo que más ganan pero sus trabajadores son los menos remunerados del sector.


“Las expectativas que tenemos en la negociación con el Banco de Bogotá son grandes, ya que esta entidad por ser una de las más representativas del sector y con mayores utilidades financieras, casi un billón y medio, creemos que debe dar respuesta a algunas necesidades que tenemos los trabajadores”, indicó Germán Acero, presidente de la subdirectiva Uneb Villavicencio.

El 27 de julio se presentó el pliego de peticiones ante la administración y el 3 de agosto iniciaron las conversaciones en la etapa de arreglo directo. Los puntos esenciales se resumen en eliminación del capítulo tercero, estabilidad laboral, procedimiento disciplinario, monto de préstamo de vivienda, escalafón, auxilio, salarios y las metas.

Aris O’Neill, fiscal de la subdirectiva Barranquilla, amplió sobre el primero de ellos. “El más difícil es el capítulo tercero, porque hay dos convenciones ya que los trabajadores que vienen de la red Megabanco tienen la mitad de la convención colectiva aparte de lo que ganan sus compañeros”. Una convención casi discriminatoria que fue montadasupuestamente para no despedir a la red de personal del Megabanco, cuando fue absorbido por el Banco de Bogotá.

Otro aspecto relevante es la tercerización,el problema es delicado porque más del 50% de la nómina total está en esta condición. “En una de las conversaciones que tuvimos con el banco le planteamos el problema y su respuesta es sencillamente que eso es generar empleo. No quiere aceptar que los empleados deben ser vinculados al banco, porque la tercerización acaba con la estabilidad laboral”, expuso Alberto Moreno, del Comité de prensa y propaganda en Medellín.

Resaltan que es importante la urgencia de un procedimiento para imponer sanciones, ya que el banco desconoce el debido proceso y los derechos de defensa de los trabajadores. Así mismo, buscan la definición de un escalafón que permita la superación dentro del banco.

En cuanto al tema de salud, el banco tiene una póliza que no cubre la totalidad de los servicios médicos y esta viene siendo manejada de forma clandestina sin conocimiento de los trabajadores. En la jornada laboral, los que vienen del Megabanco trabajan 48 horas y el resto, 40 horas semanales; se procura que el límite para todos sea las 40 horas.

O’neill subraya un punto más: “tenemos compromiso con la mesa de La Habana. El banco está en busca de una paz negociadora dentro de la responsabilidad social empresarial y como aporte a la reconciliación de los colombianos, se propone realizar con la Uneb un foro nacional sobre el sector financiero y su representación regional, como aporte a la construcción de una política financiera al servicio de la paz, la democratización del crédito y la generación de un empleo digno para todos los trabajadores”.

“Existen muchos beneficios que necesitamos los trabajadores y con esta convención lo podemos lograr”, finalizó Acero.