{image}http://lh3.googleusercontent.com/-JoBG68GOkAY/UyseSYPWbuI/AAAAAAAAGM4/74n9aUzkeHs/s400/carmen-elisa-novoa-asesinada.jpg{/image}Finalmente se está haciendo justicia en un caso de una sindicalista asesinada en Bucaramanga. De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, quien dio la orden para la muerte de una enfermera líder fue el mismo director de su clínica, que resultó ser ficha de los paramilitares. 

La historia de Colombia ronda en la falta de garantías para trabajadores sindicalistas y en la impunidad permanece la mayor parte de los homicidios. Hace 10 años fue asesinada la líder sindical reconocida y querida en Santander, Carmen Elisa Nova Hernández. Ella trabajaba en la Clínica Bucaramanga como enfermera. Lideraba como directiva del sindicato de la clínica un conflicto netamente laboral. En ese marco, la noche del 15 de julio de 2004, salió de su jornada extenuante de trabajo de 12 horas. Llegando a su casa en el barrio Provenza fue ultimada por sicarios de manera brutal.

El 18 de marzo,después de 10 años del suceso, la Fiscalía 118 de la Unidad Nacional de Derechos Humanos adscrita a la investigación exclusiva de crímenes de sindicalistas por exigencia de la OIT capturó a Hugo Castellano Chalela, quien es el médico director y accionista mayoritario de la Clínica Bucaramanga, lo sindica como responsable determinador del crimen. Se encontró, además, que el centro médico era un nido de paramilitares del bloque central Bolívar.

Las investigaciones de la Fiscalía en cárceles del paísrevelaron que paramilitares presos de ese Bloque contaron sus vínculos con el doctor Castellanos Chalela. Se estableció también que la muerte de la sindicalista fue a causa del conflicto laboral. 

Aunque el proceso judicial recién inicia, se sabe que la pena máximaa imponer es la vigente al momento del homicidio y serían 30 años de cárcel. La responsable de la unidad viajó hasta Bucaramanga a tomar la indagatoria del médico.

Luis Carlos Domínguez Prada, abogado defensor de derechos humanos y sindicalistas, resaltó los avances en la investigación. “Hay que perseverar en la denuncia, en las declaraciones, en los testimonios. No dejar ningún aporte probatorio en estos casos de crímenes porque es lo que puede ayudar a la justicia. Fue muy importante la labor de los familiares y los sindicalistas de Santander que asistieron a la Fiscalía. En el caso de los sindicalistas asesinados siempre hay que tener una gran prioridad con las víctimas; hacer lo que está a nuestro alcance sin ningún temor”.